miércoles, 10 de octubre de 2018

¿Eres o te crees talentoso?






*Samuel Gómez Patiño


Esta vez vamos a iniciar con definir el concepto de talento. Derivado del latín “talentum”, está vinculado con la aptitud o inteligencia y, se trata de la capacidad para ejercer una cierta ocupación o para desempeñar una actividad. Entonces podemos decir que el talento es la aptitud (capacidad para realizar adecuadamente cierta actividad, función o servicio) que nos ayuda a ejercer una tarea o tareas con eficiencia, de acuerdo a los cánones establecidos.


            Cuando inicie mi carrera de administrador de empresas no sabía exactamente en qué área me quería desempeñar, hasta que llegando al sexto semestre me encontré con el maestro Hugo Rojas que nos impartió la materia de finanzas, entonces me di cuenta que era la parte de la administración que me gustaría desempeñar y, no necesariamente por el dinero, sino por la oportunidad de aprender a optimizar los recursos para logar los objetivos organizacionales.

            De los cuatro maestros que me encauzaron por este camino solo me acuerdo del que ya mencionamos y del Dr. Sergio Octavio Vázquez López, que al impartirme en el último semestre me llevo a demostrarle que un administrador también podía ser financiero, ya que hasta la fecha parece que solo quieren contadores manejando los recursos económicos de las empresas.

            Recuerdo que en ese último semestre, nos tocó en la misma semana resolver dos casos prácticos y presentarlos, el primero el lunes y el otro el jueves. Para el primero tuve la oportunidad de preparar bien a mi equipo, lo cual nos llevó a presentar la solución de una manera fácil y que el maestro no tuvo ningún punto que observarnos. Pero en el segundo, no hubo tiempo de prepararlos, por lo que termine y lleve la presentación del caso por mi cuenta.
            Cuando iniciaba la presentación, el maestro me miro y me dijo:

Usted cállese, que lo presenten los demás.

             Mis compañeros empezaron a titubear, se pusieron más nerviosos y obviamente mostraron que no sabían sobre el trabajo, por lo que ahora me dice:

Patiño, explíquelo.
Ahora no lo explico, le dije inmediatamente.
Lo primero que me paso por la mente fue que iba a reprobar por insolente, pero al final fui el único del grupo que mereció un diez de parte del maestro, primera prueba superada.

Al terminar mis estudios y preparándome para el examen profesional, me di cuenta que si quería lograr mi título profesional me convenía preparar mi caso en el área financiera, por lo que reuní y resolví los 25 casos que los maestros de finanzas manejaban y logre que el maestro secretario me permitiera presentar un caso de arrendamiento financiero. Fueron dos las razones para elegir este caso, la primera el secretario me había sentenciado a que él se encargaría de que no me titularía y resulta que él no sabía sobre finanzas y la otra demostrar que las finanzas se administran, por lo tanto es un campo de acción de nuestra carrera. Segunda prueba superada.

Me título en junio y en agosto inicia mi aventura como maestro universitario y los próximos cinco años solicito impartir las materias de finanzas, y por mi insistencia el subdirector académico Rodolfo Velázquez me pregunta por qué quiero dar clases de finanzas, y le comento lo mismo, las finanzas se administran, así está en los libros: administración financiera. Y entonces me dan la oportunidad de dar clases lo que me llevo a dar las materias de Análisis Financiero, Administración de Capital de Trabajo y Formulación y Evaluación de Proyectos de Inversión en la Facultad de Contaduría y Administración, y Finanzas de la Empresa y Crédito y Finanzas en la antigua Facultad de Economía, así durante más de 20 años. Tercera prueba superada.

Al estudiar la maestría, la idea principal era terminar en el área financiera por lo que una parte la lleve en la Especialidad de Administración Financiera y al final mi trabajo terminal fue una comparación y proyección de los estados financieros a través de las razones financieras de las empresas “Palacio de Hierro” y Liverpol” con los estados financieros presentados a través de la Bolsa Mexicana de Valores. Obtuve el grado de maestro en Administración General con especialidad en Finanzas. Cuarta prueba superada.

Cuando me dieron la oportunidad de un Tiempo Completo en la universidad, para lograr la plaza de tiempo interino me solicitan escoger un tema para el concurso de oposición, por supuesto solicite que fuera en finanzas, y los dos maestros que compitieron por mi lugar no lograron quedarse. Quinta prueba superada.

Por fin llego, el concurso de oposición para la plaza definitiva dos años después y fue con la misma tónica, solicitando que fuera en finanzas el tema. Esta vez, nadie quiso competir conmigo y ahora soy maestro de tiempo completo titular. Sexta prueba superada.

En la actualidad, y desde hace 5 años no imparto las materias de finanzas no porque no tenga talento, sino por venganza de personas que les gusta reunirse de personas sin talento para sentirse que ellos lo saben todo.

Alguna vez le dije alguna compañera, ni siquiera te atrevas a decir que fuiste mi alumna, ya que cuando estudiaba la maestría, preparábamos una presentación en el área de mercadotecnia, y antes de presentarla en clases le comente que no estaba bien su tema. Se atrevió a presentarlo frente al grupo y al intervenir con mi exposición tuve que decirles a los compañeros que estaba mal y la corregí. En mi larga trayectoria he conocido personas sin talento, pero nunca a alguien sin la suficiente madurez para aceptarlo. Hace poco, para obtener una plaza, escogió un tema del área que coordina y que supuestamente domina, y fue reprobada porque lo único que demostró es que no sabe.

Hasta parece que debes de ser una “persona con talentos diferentes” para que te premien cuando demuestras que no sabes; por lo menos debió tener dignidad y dejar de coordinar lo que ni ella entiende, ahora que ni diga que me conoce. Un líder siempre será tan eficiente como la gente que está a su alrededor o tan mediocre como los que mantiene cerca de él.

La próxima semana, Maluma y la sociedad actual

            Me gustaría leer tú opinión, puedes escribirme al correo samuelgomez@uabc.edu.mx o en Facebook: Samuel Gómez Patiño

*Director del Área 1 de los Toastmasters y
Presidente del Club Ejecutivo de Tijuana
Licenciado y Maestro en Administración de Empresas
Catedrático en la Facultad de Contaduría y Administración, en Tijuana
Universidad Autónoma de Baja California

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Popular Posts