Palabras mágicas. EP

 

 

Sandra Gómez                             

 

Estimado lector, siguiendo la serie de escuela de padres (EP), en esta ocasión retomo las palabras mágicas de programas educativos para niños como “Plaza Sésamo”; ¿ya sabes cuáles son?

 La vida nos presenta retos y cuando somos padres nos ponen a prueba, únicamente hasta ser abuelos se nos evalúa. Permítame explicarme, Ya leyó: ¿el Zoológico de mi Tito?, le recomiendo lo busque en El Diario el Volcán para que lo que va a leer no le resulte extraño.

            Algunos de nosotros criticamos a las personas porque no son buenos padres, y cuando nos toca hacer ese papel se nos olvida todo lo que criticamos; algunos más cuando son abuelos toman el papel de padres incluso desplazando a sus hijos; algunos más tienen hijos después de los 40 cuando otros son abuelos ellos apenas inician (…), en fin. El punto es que es más fácil hablar de crianza y “buena educación” cuando de los hijos de otros se trata.  En esta ocasión me referiré únicamente a los padres de niños neurotípicos (normales).

 El mayor reto como padres es reconocer cuando nos equivocamos y ser capaces de reflexionar y cambiar de dirección en caso necesario, a esta frase de inflexión le decimos “usted disculpe” con tono humilde y escuchando el doble de lo que hablamos. Seguimos con un “por favor” me podría explicar (…) Para aprender de quien con conocimiento y experiencia nos pueda guiar; dejarnos guiar es un acto de humildad y reconocimiento de que no lo sabemos todo.

 Los hijos aprenden de lo que ven, imitan las conductas de sus cuidadores, así que una de las palabras mágicas es “por favor” para abrir las puertas de un dialogo e intercambio de servicios. La segunda palabra mágica es “GRACIAS”; sin duda una expresión genuina de gratitud es la llave para la comunicación asertiva.

 Revisando nuevo material me encontré en You tube: Sésamo; serie aprende #conmigo (revisado el 29 de julio 2020) unos videos cortos que ilustran la palabra gratitud a los prestadores de servicios colocándoles como “súper héroes”, ellos son los médicos, enfermeros, camilleros, los que cosechan la comida, los que despachan en el supermercado, etc., la serie también incluye videos animados para que los niños se sensibilicen en el uso de las mascarillas y el lavado de manos.

 Debemos aprender a dar gracias por lo que tenemos, y enseñar a los niños a que hagan su parte. Todos debemos ayudar en casa además de cumplir con nuestras responsabilidades académicas y/o laborales. La casa no se va de vacaciones, se deben seguir haciendo las cosas básicas de seguridad e higiene. Una casa ordenada es más acogedora y tienen un efecto tranquilizador entre quienes la habitan.

 Practiquemos dar gracias y pedir las cosas por favor. Ninguna persona está obligada a atendernos aun con un pago de por medio, en realidad la buena educación empieza en casa y se modela a través del ejemplo.

 Te invito a comentar si tienes otra palabra mágica. Hasta la próxima historia de vida Dra. Sandra Gómez Patiño.