jueves, 20 de agosto de 2020

Reforzarán agenda verde de los porcicultores

 


 

El Volcán/Sader

 

 

Con base en los buenos resultados que ya se obtuvieron en 2019 en el programa de apoyos para que las granjas porcícolas dejen de funcionar como fuentes de contaminación ambiental, este programa será nuevamente una de las prioridades de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER Jalisco) para que la porcicultura jalisciense refuerce su enfoque sustentable y opere con más rentabilidad.



El director de Fomento Porcícola de la dependencia, César Augusto Anaya Valenzuela, informó que para este año se disponen de 10 millones de pesos para el apoyo de establecer plantas de tratamiento en las granjas; o bien para acciones complementarias de quienes ya cumplieron con este paso, como podrían ser biodigestores y otras obras de infraestructura que incidan en la productividad. 


Puntualizó este funcionario que para este año hay opción de que se apoye a los porcicultores de todo el territorio estatal, a diferencia del ejercicio del pasado año, cuando el apoyo se limitó a 17 municipios de la Cuenca del río Santiago. 


De acuerdo con las reglas de operación 2020, Anaya Valenzuela puntualizó que el monto de los apoyos es de 200 mil pesos; o bien el 50% del costo del proyecto.




Mencionó que en lo fue la operación del Programa de Modernización de Granjas Porcicolas se tuvo una magnífica coordinación con el organismo cúpula de este sector: la Unión Regional de Porcicultores de Jalisco (URPJ), lo que facilitó las acciones para que cada productor interesado consiguiera a su personal técnico de confianza para el establecimiento de su planta de tratamiento.


Anaya Valenzuela citó que los resultados supusieron que 24 productores se beneficiaran con la instalación de sus plantas, lo que además de facilitar que se cumpla la norma ambiental de las aguas residuales, tiene otras ventajas adicionales, como la elaboración de compostas a partir de los lodos, o bien el reciclaje de materia orgánica que puede volverse a utilizar en la alimentación de animales.


Como ejemplo de porcicultores beneficiados con este programa, se tiene el testimonio de Jesús Castellanos Carlín, granjero de Zapotlán del Rey: “Fui a la junta y salí calificado para una tratadora de agua. Me interesó mucho porque te da beneficios a largo plazo: sacas composta para tu tierra de cultivo, así la nutres, te da más kilos o toneladas de alimento para tus animales y es un beneficio muy bueno a la larga”, comentó.


También Christian Orozco, porcicultor de Tepatitlán, cuenta con una planta de tratamiento de aguas residuales, resultado del apoyo otorgado por la SADER-Jalisco. “Este proyecto fue gracias al apoyo del Gobierno del Estado es una planta de tratamiento de aguas residuales, fue muy sencillo hacer la solicitud y fuimos beneficiados. La obra está proyectada para 100 vientres, ahorita sólo tenemos 40, pero tenemos esa capacidad para seguir creciendo; es un sistema muy sencillo, consta de tres fosas, un separador de sólido y una plancha para el secado del sólido”.




Jorge Iván Espinosa Vázquez, directivo de la URPJ, destacó que ha habido un trabajo muy cercano con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de Jalisco para apoyar a los porcicultores del estado: “La administración que estamos teniendo actualmente con el licenciado Alberto Esquer al frente de la Secretaría, ha traído un apoyo inédito, realmente nos hemos encontrado una posición muy favorable; un acercamiento, una disponibilidad para poder escuchar las necesidades que tiene el productor y poder poner a gente profesional atendiendo los proyectos que son necesarios para atender asuntos prioritarios en el tema de producción de porcicultura en específico, y como resultado estamos viendo estos programas que han desarrollado sumamente benéficos para el productor, independientemente de la escala en la que participe”.


Para el ejercicio del programa en este 2020 está por darse la dictaminación para definir el número de productores, pero se les dará preferencia a los pequeños productores, según lo señaló César Augusto Anaya Valenzuela, “estamos hablando de los que tienen 150, 200 vientres (hembras) para abajo, es a los que queremos privilegiar, porque, repito, si hablamos de necesidades y de recursos que se tengan que dirigir a los que menos tienen o que tienen más complicada su situación, es a ellos, a ese margen de productores”.



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