Partidos podrían renunciar a su financiamiento

 

 

 

Juan José Ríos Ríos

 

  

No puede dejarse sin considerar el fondo de la decisión tomada por los diputados al aprobar, en lo general, reformas sobre renuncia parcial y/o devolución del financiamiento de los partidos políticos, lo que modifica las leyes General de Partidos Políticos y Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.

            Con 327 votos a favor, 148 en contra y una abstención, el dictamen con proyecto de decreto que reforma los artículos 23 y 25 de la Ley General de Partidos Políticos, y el 19 Ter de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, establece que los partidos políticos puedan renunciar parcialmente y en su caso reintegrar, en cualquier tiempo, su financiamiento para actividades ordinarias permanentes.

            Se indica que lo anterior será siempre y cuando no se vea afectado el cumplimiento de dichas actividades y prevalezca en su financiamiento los recursos públicos sobre los de origen privado, en el caso de catástrofes sufridas en el territorio nacional por cualquier desastre o fenómeno contemplado en la Ley General de Protección Civil o cualquier otro que ponga a la sociedad en grave peligro.

            El dictamen indica que el reintegro de recursos también será aplicable tratándose de remanentes del ejercicio respecto de este tipo de financiamiento. Refiere que los recursos deberán reintegrarse a la Tesorería de la Federación por acuerdo del Consejo General de la autoridad electoral, cuando no hayan sido entregados a los partidos políticos y a solicitud del Comité Ejecutivo Nacional o instancia equivalente que ostente la representación legal del partido.

            Además, estipula que en caso de que ya se hubieran entregado a los partidos políticos o de remanentes del ejercicio, por concepto de financiamiento para actividades ordinarias permanentes, el Comité Ejecutivo Nacional o instancia equivalente que ostente la representación legal del partido, tramitará su reintegro ante la Tesorería de la Federación e informará al Consejo General de la autoridad electoral la decisión correspondiente.

            En cuanto al reintegro de los remanentes del ejercicio se podrá realizar hasta en tanto no sea presentado a la Unidad Técnica, el informe anual previsto en el artículo 78, numeral 1, inciso b) de la presente ley.

            En la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria se establece que no será una falta o reintegro del financiamiento público que, en su caso, realicen los partidos políticos, en términos de la ley. De igual forma, que los ingresos, por concepto de aprovechamientos que los partidos enteren a la Tesorería, podrán ser destinados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público preferentemente para atender los efectos de cualquier desastre.

            Llama la atención, tal y como lo establece el comunicado oficial difundid al respecto, que las reformas mencionadas se lograron con el apoyo de PRI, Morena, PT y PVEM en la Cámara de Diputados, y para que los ciudadanos nos demos cuenta del alcance de las mismas, el dirigente de Morena, Mario Delgado, informó que devolverán 50 por ciento de las prerrogativas que recibirán en 2022, lo que significa renunciar a 852 millones de pesos de mil 719 millones que recibirá.

            MORENA ya puso el ejemplo, devolverán al erario público la mitad de lo que se les destina como partido para el 2022. El PRI por su parte, con su participación votando a favor de las reformas, parece que quiere recomponer su comportamiento como partido también, pues de hecho hizo a un lado sus amañadas y muy criticadas coaliciones y mancuernas con el PAN y el PRD, rémoras, todos, que reciben excesiva la cantidad de dinero año con año se entrega del presupuesto nacional.

            Es de esperarse que el ejemplo de MORENA sea seguido por los demás partidos políticos, pues lo que se regrese se destinará para catástrofes sufridas en el territorio nacional por cualquier desastre o fenómeno contemplado en la Ley General de Protección Civil, o cualquier otro que ponga a la sociedad en grave peligro, y peligro es que los partidos y los políticos dilapiden tanto dinero que debiera destinarse para beneficio colectivo, es decir, de todos los ciudadanos, en obras o servicios que tanto faltan. Pero algo es algo, por algo se empieza, dice el refrán, lo bueno es que ya se empezó para berrinche de quienes no quieren el cambio, de fondo.