Juan
José Ríos Ríos
Surgidas
como la panacea en lo cultural y generación de empleo, desarrollo y progreso,
obras millonarias como el Centro para la Cultura y las Artes José Rolón y el
Centro Tecnológico Agropecuario de Ciudad Guzmán, la primera sufre de rapiña,
vandalismo y abandono total, mientras que de la segunda no se sabe cuándo, ni
cómo ni para qué servirá.
Lamentable es que en una ciudad que
se dice culta y cuna de grandes artistas, que sin duda lo es, pero en la que se
permite que las obras y proyectos que tienden, o cuando menos esa fue la
intención cuando se proyectaron y se construyeron - aunque no están terminadas
del todo - a mantener y superar ese nivel, esa dignidad, el abandono de las
autoridades permita que personas penetran en ellas sin ninguna restricción
haciendo vandalismo, rapiña, robo y poniendo por los suelos lo que ya debiera
ser un centro cultural digno y una buena fuente de empleos.
El Centro para la Cultura y las Artes
es sólo un edificio a medio terminar, sin equipamiento y de lo que se le ha
dotado, por la falta de vigilancia e interés del Gobierno estatal y local,
sufra daños, robos y se utilice casi como hotel de paso, nada digno para una
ciudad como la nuestra y mucho menos para lo que le dio origen.
Está visto que los Gobiernos y los
funcionarios públicos son sólo aves de paso, hacen o dejan de hacer, se les
termina su tiempo y se les olvida concluir o pugnar porque se concluyan obras y
proyectos tan importantes para una ciudad como la nuestra, tan carente de
sitios sanos para la cultura, la recreación, la superación y hasta para dar
empleo, como lo deben ser el Centro para la Cultura y las Artes José Rolón y el
Centro Tecnológico Agropecuario.
En el pasado se ha tenido esta
suerte, este tipo de experiencias, poco de lo que se edifica o se construye
para fortalecer el desarrollo y el progreso del Municipio y de su gente, queda
en la nada, en negocio de unos cuantos o en el abandono y destrucción total.
Esta suerte ha tenido la embazadora de duraznos que se instaló- en tiempos de
la alcaldesa María Elena Larios González – en El Fresnito y el Mercado de
Abastos, ¿dónde está la inversión y los beneficios del Centro o Parque
Software, del mismo Parque Industrial Zapotlán 2000?.
Tal parece que a los Gobiernos que
han tenido la oportunidad de servir a esta bendita tierra, no lo han hecho del
todo como se necesita, con la dedicación y el empeño que en su tiempo puso para
Ciudad Guzmán el Alcalde Carlos Paez Stille, porque de lo hecho en su período
casi todo está vigente y cumpliendo los fines que les dieron origen al Hospital
Regional, la UPN, aunque la CONASUPO desapareció, su edificación sirve como
Unidad Administrativa Municipal, que debiera de ser más que una simple extensión
y fuente de empleo del Gobierno local.
Es de esperarse y casi una exigencia
el que no se eche en saco roto, que no se olvide el Gobierno actual de que las
obras se deben de concluir aunque hayan sido proyectadas o iniciadas por
Gobiernos anteriores, que el Centro para la Cultura y las Artes José Rolón no
se deje en el abandono y como refugio de malvivientes, vándalos y aves de
rapiña, la inversión realizada y el proyecto para dar más espacios para la
cultura, la recreación y como fuentes de empleo para los ciudadanos de Zapotlán
el Grande, se los demanda.
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