El
Volcán/Sader
La
apuesta por un desarrollo sustentable del campo está plasmada en políticas
públicas concretas con soporte presupuestal, lo que se ha confirmado durante
tres años consecutivos en las acciones de la Secretaría de Agricultura y
Desarrollo Rural (SADER Jalisco).
Así lo expresó el responsable del despacho de la
dependencia estatal, Salvador Álvarez García, quien refirió que, a propósito
del Día Internacional de la Madre Tierra, hay en marcha diversas acciones que
esta secretaría ha impulsado y que tienen en común la promoción de las
actividades productivas en el campo en forma amistosa con el medio ambiente.
Apuntó que entre estas acciones promovidas figuran
la ganadería silvopastoril para reducir la desforestación, el uso de paneles
solares en establos lecheros y otros giros pecuarios, la modernización de
granjas porcícolas, la recuperación de suelos y vasos de agua, el impulso a los
agaves de la raicilla, las plantaciones de cultivos de hule, la protección de
la genética de pitayas oriundas, el rescate de maíces nativos, el empleo de
insumos y organismos benéficos para contrarrestar usos de pesticidas y agroquímicos,
entre otras acciones.
Por su parte, el director de Cadenas Productivas y Sustentabilidad, Carlos Jiménez Garma, detalló que en el ejercicio de 2021 se etiquetaron 35 millones de pesos para su canalización en diversas acciones que tienen en común las actividades ligadas a la sustentabilidad y apoyar la biodiversidad.
“Continuamos con uno de los programas ancla y uno de
los programas base, que es el Fomento a la Producción Agropecuaria Sustentable;
el otro programa es de implementación de la Energía Renovable, y el tercero que
es el de Conservación de Recursos Naturales, entre esos tres son 35 millones de
pesos”, aportados por la SADER Jalisco.
Mencionó que en el ejercicio de este año se tendrán
en cuenta entre las prioridades de los proyectos susceptibles de apoyos, las
acciones para optimizar el uso del agua en dos cuencas de gran importancia en
relación con la zona conurbada tapatía y de otros centros de población, como
son las cuencas de los ríos Santiago y Verde.
Insistió en que este esquema se pretende incidir en la
reducción del consumo de agua en actividades agropecuarias, para contar con más
disponibilidad para el consumo humano. Expuso que actualmente se configura un
modelo operativo aplicable a la agricultura y ganadería para su posterior
difusión y aplicación.
También que hay otros programas (según reglas de
operación muy especificadas) que inciden en el desarrollo sustentable, como la
promoción de organismos benéficos y la crianza de aves a base de insumos
sustentables, entre otros.
Estos
proyectos también tienen que ver con que se bajen los costos de las unidades
productivas. Un ejemplo al respecto ilustra el impacto de los paneles solares
en la ganadería lechera. Según informes de la Dirección de Fomento Pecuario de
la SADER, un establo de 50 vacas (con 35 de éstas en producción) se gasta en
promedio bimestral siete mil pesos. Con el empleo de paneles solares el costo
se reduce a la mitad, luego de la correspondiente tramitología aprobada por la
Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Otro
ejemplo, en granjas de gallinas de postura con concentraciones de 100 mil a 500
mil aves, el uso de los paneles deja ahorros de 20% en el consumo eléctrico,
según datos de la Unión de Asociaciones Avícolas de Jalisco.
EL
DATO
La
primera vez que se celebró el Día Internacional de la Madre Tierra (o
simplemente Día de la Tierra) fue en 1970, cuando cerca de 20 millones de
personas salieron a las calles de Estados Unidos para protestar contra los
derrames de petróleo y la contaminación de los ríos. Aunque fue en 2009 cuando
la ONU decretó su conmemoración cada año.
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