El Volcán/Congreso
En la
Glosa del Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco (IPEJAL), la
diputada vallartense Yussara Canales lanzó un posicionamiento firme
y categórico para exigir que se ponga fin a los abusos, la
incongruencia y el deterioro que enfrenta el sistema de pensiones en
la entidad.
Yussara Canales colocó en el centro del debate el
intento del director de IPEJAL, Juan Partida, de aumentarse el sueldo
en un 67%, pasando de $72 mil a $121 mil pesos mensuales.
“Parece
un guion de La Ley de Herodes, pero no lo es. ¿Cómo puede alguien
considerar prudente subirse el sueldo mientras miles de jubilados no
tienen sus medicinas?”, afirmó la legisladora.
Canales
subrayó que esta decisión evidencia una total falta de sentido
común y una desconexión absoluta con la realidad del instituto, que
hoy enfrenta un colapso financiero y una profunda crisis de confianza
entre trabajadores y pensionados.
La diputada recordó que el
instituto arrastra un déficit actuarial de más de 301 mil millones
de pesos, producto de prácticas riesgosas y decisiones
irresponsables tomadas durante años.
El más reciente estudio
actuarial presentado por el gobierno del estado confirma que el fondo
de pensiones solo garantiza suficiencia hasta 2030, seis años menos
de lo proyectado anteriormente.
“Hablamos del futuro de miles
de personas que dieron su vida al servicio público. La
irresponsabilidad financiera no puede seguir normalizándose”.
Canales también evidenció información falsa presentada por
el propio director del instituto, quien aseguró que existen 11
hospitales privados disponibles para los afiliados.
“Eso no
es verdad. Solo hay cuatro. Y esa mentira se ha repetido incluso
frente a las protestas de trabajadores y jubilados durante todo el
año”.
Además, denunció que continúan las quejas por el
desabasto de medicamentos y la mala atención médica, un reclamo
permanente que no ha sido atendido por las autoridades.
Para
finalizar la diputada lamentó que los incrementos a las pensiones
5.85% y 5.21%, según el rango no alcanzan ni para equiparar la
inflación, dejando a miles de personas en una situación
precaria.
“Los afiliados no piden privilegios. Piden respeto
y dignidad. Piden que se administre con decencia lo que construyeron
con su trabajo”.
Recordó que durante el año se han
realizado múltiples manifestaciones por parte de trabajadores,
jubilados y pensionados exigiendo atención médica, medicamentos y
mejores condiciones.
La diputada concluyó su intervención
reiterando la importancia de tomar decisiones éticas y responsables
en un instituto que administra el futuro de miles de familias
jaliscienses.
“Mientras algunos funcionarios buscan cobrar
121 mil pesos al mes, hay jubilados sin medicinas. Eso es
inaceptable. El IPEJAL debe volver a regirse por sentido común,
transparencia y respeto”.
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